Los Heraldos del Evangelio procuran llevar la Buena Nueva del Evangelio a todas partes. Allí donde se les invita a actuar, en coordinación con las directrices pastorales de cada diócesis, los sacerdotes Heraldos procuran traer palabras de alegría, confianza y apoyo a los católicos y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad. Para llevar este mensaje aún más lejos, el programa “Palabra para nuestros días” busca ofrecer una visión sintética de los puntos esenciales de la liturgia de cada domingo.
El vídeo que ofrecemos a continuación contiene extractos de algunas de las homilías pronunciadas en diversos lugares de Brasil, el domingo 24 de noviembre de 2019:
- P. Alex Barbosa de Brito — Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en Cotia (São Paulo)
- P. Anderson Fernandes Pereira — Sede de los Heraldos, en Brasilia (Distrito Federal)
- P. Aaron Otílio Gabriel Mazive — Sede de los Heraldos, en Maputo (Mozambique)
- P. Dartagnan Alves de Oliveira — Capilla de San Francisco, en Caieiras (São Paulo)
- P. Josué Alexander Siqueira — Capilla de San Pablo, en Caieiras (São Paulo)
- P. Lourenáo Isidoro Ferronatto — Oratorio de Nuestra Señora de Fátima, en Nova Friburgo (Rio de Janeiro)
- P. Luiz Francisco Beccari — Capilla de San José, en Caieiras (São Paulo)
- P. Max Adriano Gomes Ribeiro — Sede de los Heraldos, en Campo Grande (Mato Grande do Sul)
- P. Ricardo José Basso — Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en Cotia (São Paulo)
Resumen
Frente a la tiranía del mal sobre el hombre, la liturgia nos presenta la realeza de Cristo. En efecto, en el Evangelio vemos a los líderes del pueblo que se burlan de Nuestro Señor. Ahora, si Él viniera a la Tierra en nuestros días, predicando lo que predicaba, realizando milagros y todo tipo de bienes, ¿no querrían crucificarlo de nuevo? ¿Y quién promovería esta crucifixión no serían los mismos que promovieron su crucifixión cuando vino por primera vez? ¿Por qué? Porque hay quienes no quieren la Realeza de Cristo, prefiriendo la tiranía del mal.
¿Qué se necesita para que nuestro Señor reine hoy en día? Especialmente dos cosas: que queramos que Él reine dentro de nosotros, y que Él tenga ministros santos que deseen y trabajen para que Él reine en el mundo. En este sentido, vemos el trabajo realizado por Mons. João Clá en favor de la Iglesia, luchando por mantener la fe y la integridad de Ella en días calamitosos, atrayendo a hombres y mujeres a la vocación religiosa, y a miles de personas al seno de la Iglesia. Sin embargo, los ataques contra su persona y su integridad se multiplican. ¿Por qué tanta persecución? ¿Para acabar con el celibato? ¿Para destruir el sacerdocio y la vida religiosa? ¿Para extinguir la fe y la familia?
Por lo tanto, debemos orar para que termine de una vez la tiranía que pretenden nuevamente y que tiene la intención de perseguir a Nuestro Señor en los miembros de Su Iglesia. Es cierto que Nuestro Señor es Rey y que su reino se implantará en determinado momento en la faz de la tierra. Esto es lo que pedimos todos los días: “Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el Cielo”. Sin embargo, se nos invita a participar de este reino, uniéndonos a Él y viviendo desde ahora como súbditos de este Rey.